Origen: Escocia
Resumen: El nombre de este perro indica su país de origen. Desde siglos existía en el interior de Escocia un tipo de terrier muy similar al Scottish aunque su selección comenzó en la segunda mitad del siglo XIX. Se dice que un criador cuyo nombre era Van Best había seleccionado un tipo de terrier particularmente adecuado a la caza en madriguera. Esté perro, denominado Aberdeen terrier, fue cruzado después con otros perros de madriguera con patas cortas entre los cuales seguramente estaba el Cairn hasta llegar a la formación definitiva del Scottish terrier con el aspecto actual. Este nuevo perro encontró rápidamente el favor del público que lo apreciaba sobre todo por su gran robustez y por su carácter firme y decidido, hasta el punto que se difundió con gran rapidez en todos los países europeos, en las Américas y en Australia. Hoy el Scottish terrier es uno de los terrier más conocidos.
Apariencia general: Es un perro compacto, de tamaño apropiado para cacería bajo tierra. Sus miembros son cortos; de porte alerta, presenta una imagen de gran potencia y actividad en un volumen reducido. La cabeza da la impresión de ser larga en comparación con la talla del perro. Es muy ágil y activo a pesar de sus miembros cortos.
Conducta y temperamento: Osado, pero nunca agresivo.
Características: Es un perro fiel, leal, noble, independiente y reservado, pero valiente y muy inteligente.
Cola: Debe ser de largo moderado confiriendo al perro una armonía general. Gruesa en su implantación y adelgazándose hacia la punta, llevada vertical o con una ligera curvatura.
Andadura/Movimiento: Uniforme y desenvuelto, derecho tanto atrás y adelante con un empuje desde atrás llevando un paso regular.
Pelo: Pegado al cuerpo; doble capa : pelaje interno corto, denso y suave; pelaje externo duro, denso y de textura de alambre; las dos capas lo protegen de la intemperie.
Color: Negro, trigo o de cualquier color atigrado.
Talla/Altura a la cruz: 25,4 - 28 cm
Peso: 8,6 kg - 10,4 kg